¡Ayúdame a encontrar el nombre de mi marca!
Uno de los momentos más difíciles pero indispensables al momento de emprender es la asignación del nombre por el que tus clientes conocerán tu marca.
La lluvia de ideas es un buen recurso para llegar al nombre ideal, sin embargo hay varios aspectos a considerar antes de enlistar las posibles opciones.
El sentido común y experiencias de referencias pueden darnos una noción de cuáles características hay que considerar para bautizar a nuestro producto o marca, pero va más allá de una visión ambigua.
Empecemos aprendiendo que es el Naming. En resumidas palabras Naming es el proceso creativo para crear el nombre de la empresa o de la marca. Puede parecer sencillo pero es más complejo debido a que el nombre que elijamos va a determinar una parte importante de la imagen que la empresa va a tener a percepción del consumidor. El nombre que asignamos es el primer contacto entre el consumidor y nosotros.
Hay millones de marcas registradas pero en teoría todas deberían ser diferentes entre ellas, ya sea por objetivos o valores agregados, por lo tanto nuestro nombre debe proyectar los principios que previamente debimos establecer para nuestra compañía. Asegúrate de que tu propuesta comercial tenga relación directa y coherencia con el nombre a elegir. Pero sin caer en lo obvio o en lo “equis”.
Otra característica que debe tener el nombre de tu marca es que al momento de ser compartida con el exterior consiga una reacción a los sentidos. Un nombre con mucho “punch” que destaque entre las conversaciones y palabras cotidianas. Todo esto bajo la connotación de ser algo positivo.
¡Evita la confusión con los clientes! Debido a que quizás cuando salgas al mercado algunas reglas del juego ya han sido estipuladas por la competencia que llevan años en el mercado tienes el deber de asignar un nombre que no pueda ser interpretado con otra rama de la industria o con otra empresa.
Tambíen tu marca debe ser fácil de recordar, pronunciar y escribir, así tendrás un posicionamiento más certero ante los consumidores.
Una vez que hayas pasado por todos estos filtros y sientas que has encontrado el nombre ideal ¡la tarea no ha terminado! Por último considera que tu propia decisión no sea tu condena. No elijas un nombre que encasilla a tu marca, puede ser que en el futuro crezcas y debas expandir tus productos y servicios y si usas un nombre bajo la terminología de un solo campo podrá resultar fatal.
Escríbenos y nosotros te seguimos en este proceso creativo. Será más fácil si trabajamos en equipo.